Descubre el legado de Manuel Albarrán: La segunda publicación de su obra fotográfica sobre la Semana Santa de Sevilla

La figura de Manuel Albarrán Expósito sigue viva gracias a su impresionante trabajo documental sobre la Semana Santa de Sevilla, y ahora, Ediciones Alfar vuelve a homenajearlo con la segunda publicación de su obra, titulada 'La Semana Santa de Manuel Albarrán. El fotógrafo de las cofradías de Sevilla (1919-1954)'. Esta reedición llega justo a tiempo para la Feria del Libro de Sevilla, que se celebra a finales de octubre, y conmemora el 60.º aniversario de su fallecimiento.

Un recorrido visual por la Semana Santa de Sevilla

El legado fotográfico de Albarrán es crucial para comprender la evolución de las cofradías y la representación visual de la Semana Santa. Desde sus primeros pasos en los años 30 hasta su fallecimiento en 1954, Albarrán transformó el arte de la fotografía cofrade, destacándose por su técnica innovadora al realizar fotos de estudio dentro de templos y en espacios privados de las hermandades.

Este nuevo volumen, fruto de la colaboración de los investigadores Emilio José Balbuena Arriola y Enrique Guevara Pérez, recopila más de 400 imágenes, muchas de ellas inéditas, que muestran la belleza y solemnidad de los cultos y las cofradías de Sevilla. La calidad y exclusividad de las fotografías que integran la obra hacen de esta publicación un tesoro visual para los amantes de la Semana Santa y la fotografía histórica.

Un homenaje a su dedicación

Manuel Albarrán no fue solo un fotógrafo; fue un cronista visual de una de las tradiciones más arraigadas de Sevilla. Su trabajo no pasó desapercibido, y en 1951, fue reconocido con una placa de plata grabada con los escudos de todas las hermandades de la ciudad, un testimonio del impacto de su obra en la comunidad cofrade.

Este homenaje se refleja en la nueva publicación, que no solo da continuidad al primer volumen lanzado en la Cuaresma pasada, sino que también profundiza en la evolución de la fotografía cofrade. Prologado por el conocido fotógrafo cofrade Daniel Villalba Rodríguez, el libro cuenta también con notas biográficas escritas por José Manuel y Luis Antonio de Ben Oliver, quienes representan a la familia que resguarda el Archivo Albarrán.

Tres bloques temáticos: imágenes, cultos y cofradías

La obra está organizada en tres grandes bloques: imágenes, cultos y cofradías. Cada sección reúne fotografías en blanco y negro de gran calidad que ilustran distintos aspectos de la Semana Santa. Desde los imponentes pasos procesionales hasta los momentos más íntimos de veneración, el lector podrá adentrarse en la Sevilla más devota a través del lente de Albarrán.

Una de las imágenes más destacadas de esta edición es la del Señor del Silencio en el Desprecio de Herodes, capturada en el templo de San Juan de la Palma. Esta fotografía, que abre el libro, es un claro ejemplo del talento de Albarrán para plasmar la grandeza y el recogimiento de la Semana Santa sevillana.

Un formato de lujo para una obra de colección

Además de su valioso contenido gráfico, la edición ha sido cuidadosamente diseñada para resaltar la belleza de las fotografías. La publicación cuenta con una cubierta de solapas de 12 cm, impresa en estucado mate de 300 gramos y con un acabado de laminado brillo en color 4/4. El interior sigue esta línea de calidad con páginas en estucado brillo de 115 gramos, que aseguran una alta calidad fotográfica en las 360 páginas que componen el libro.

El formato del libro, de 23 x 29 cm, y una tirada limitada de 1.500 ejemplares, convierten esta publicación en una pieza de colección, destinada tanto a aficionados a la Semana Santa como a expertos en fotografía histórica.

Un tributo a la Sevilla cofrade

Este segundo volumen no solo es un homenaje a Manuel Albarrán, sino también un testimonio de la importancia de la Semana Santa en la cultura e historia de Sevilla. La dedicación y el talento de Albarrán han permitido preservar para la posteridad imágenes que capturan la esencia misma de una tradición centenaria, cuyo legado sigue vivo en cada procesión, cada paso y cada mirada devota.