Jerez hace historia con una Magna Mariana única: 36 vírgenes procesionan por la ciudad en un homenaje sin precedentes

La Magna Mariana de Jerez deja una huella imborrable en la ciudad al reunir 36 imágenes marianas en la calle durante más de 12 horas, celebrando la fe y el arte en preparación para el Jubileo 2025.

Jerez de la Frontera vivió el 19 de octubre de 2024 una de las jornadas más memorables de su historia cofrade. En un evento que ha sido catalogado como histórico, 36 imágenes de la Virgen María salieron en procesión, llenando las calles de devotos, turistas y curiosos que se congregaron para presenciar esta manifestación de fe sin precedentes. Esta Magna Mariana, organizada en conmemoración del Jubileo 2025 convocado por el Papa Francisco, convirtió a Jerez en un epicentro de espiritualidad, cultura y tradición, atrayendo a miles de personas de toda España y del extranjero.

Dos años de preparación para un evento único

La organización de este magno evento estuvo a cargo de la Unión de Hermandades de Jerez, que dedicó más de dos años de planificación para asegurar que todo saliera perfecto. Este acontecimiento tenía como objetivo principal rendir homenaje a la Virgen María y preparar espiritualmente a los fieles para el Jubileo de 2025, un evento que se celebra cada 25 años y que es de gran importancia para la Iglesia católica. El resultado fue una jornada de más de 12 horas de procesiones, que mantuvo en vilo a la ciudad hasta bien entrada la madrugada.

Un cambio de fecha que no detuvo la devoción

Aunque la Magna Mariana estaba inicialmente prevista para el 12 de octubre, coincidiendo con la festividad del Pilar, las malas previsiones meteorológicas obligaron a posponer el evento. El 19 de octubre fue la nueva fecha elegida tras consultas entre la Unión de Hermandades, las cofradías y el Obispado, lo que obligó a ajustar la participación de algunas hermandades, como la de Amor y Sacrificio, que no pudo sumarse por falta de costaleros. Sin embargo, este cambio no afectó al fervor de los jerezanos ni a la espectacularidad del evento.

Jerez, escenario de fe y arte

La jornada comenzó a las 14:15 horas con la salida de Nuestra Señora de las Aguas, de la Hermandad de la Salud de San Rafael. A partir de ese momento, las calles del centro histórico de Jerez fueron testigos del incesante paso de imágenes marianas, culminando más de 12 horas después con la recogida de María Santísima de la Concepción, de la Parroquia de Las Viñas. Entre las imágenes más destacadas del cortejo, se encontraba la Copatrona de Jerez, Nuestra Señora del Socorro, de la Hermandad de la Viga, que cerró el recorrido por su gran relevancia en la ciudad.

Estampas inéditas y una organización milimétrica

Además de las imágenes tradicionales de la Semana Santa jerezana, la Magna Mariana ofreció estampas inéditas, como la procesión de Nuestra Señora de los Remedios bajo palio, algo que no sucedía desde hace casi 40 años. También se dieron casos excepcionales, como el de algunas tallas que habitualmente no procesionan en Semana Santa, como las Mercedes, las Bienaventuranzas o el Silencio, que tuvieron su momento de protagonismo en este evento. A nivel organizativo, la Unión de Hermandades tuvo que coordinar la salida de una decena de imágenes desde templos diferentes a los habituales debido a cuestiones logísticas, lo que dio lugar a escenas nunca antes vistas en la ciudad.

Música y devoción: el alma de la Magna

Más de 35 bandas de música acompañaron el paso de las vírgenes, creando una atmósfera inolvidable. Bandas de cornetas, tambores y agrupaciones musicales añadieron un toque especial a la procesión, alternando momentos de silencio para respetar el recogimiento de algunas imágenes. Este equilibrio entre música y recogimiento fue uno de los aspectos más apreciados por el público, que pudo disfrutar de un ambiente de solemnidad interrumpido por melodías cargadas de emoción.

Un recorrido emblemático que marcó el corazón de la ciudad

El itinerario oficial de la Magna Mariana recorrió las calles más icónicas de Jerez, pasando por puntos tan emblemáticos como la Plaza del Arenal, la calle Larga y la Alameda Cristina, hasta culminar en el Mamelón. A lo largo de todo el recorrido, miles de personas se agolparon para ver pasar a las imágenes, muchas de ellas canonizadas y muy veneradas en la ciudad, como la Virgen de la Estrella, la Soledad o la Esperanza de la Yedra.

A pesar de algunos retrasos en la salida de ciertas hermandades, la Magna Mariana transcurrió sin mayores complicaciones, dejando una huella imborrable en la memoria colectiva de los asistentes. Este evento no solo fue una muestra de devoción religiosa, sino también un reflejo del inmenso patrimonio artístico y cultural que atesora Jerez.

Preparando el Jubileo 2025: un evento de fe global

Más allá de su espectacularidad visual, la Magna Mariana sirvió como preparación espiritual para el Jubileo de 2025, un año de gran relevancia para la Cristiandad. El obispo de Jerez, José Rico Pavés, resaltó la importancia de esta procesión para fortalecer la fe y unir a los fieles en un contexto de celebración religiosa. El evento también coincidió con el Año Jubilar del Carmen, que conmemora el centenario de la coronación canónica de la imagen carmelita de Jerez, sumando aún más simbolismo a la jornada.